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viernes, 14 de febrero de 2014

Loser y reincidente (pero con gusto)




En nuestra última reseña hablamos de Francis Drake, un buen juego que a la Ficha Negra se le da tremendamente mal. He perdido todas mis partidas estrepitosamente, y una cosa es perder y otra es ser muy loser.

Pero contrariamente a lo que pueda parecer, el hecho de que un juego que me gusta me fustigue y me humille, me mola. Si un juego me gusta y no hay manera de ganar necesito rejugarlo. Quiero mejorar. Me pone que un juego se me resista.

Algunos diréis que me va ser un perdedor, pero no es eso. Mi mala racha con el Francis Drake y mis ganas de rejugarlo me han hecho pensar en el efecto que tiene la victoria o la derrota al valorar un juego y a la hora de querer rejugarlo.

Leo a menudo muchas reseñas de jugones respetables y con credibilidad que en sus comentarios hablan muy bien de un juego y añaden "y no tiene nada que ver que ganase la partida"... buf, algo huele mal en esa reseña. Ja, ja.

Ocurre también que esos mismos críticos despellejan a muerte un juego y en su rajada acaban diciendo "y no tiene nada que ver que quedase el último y se me diera fatal la partida, probaremos a ver si el juego está roto o simplemente es malo". 

Cosas así he leído, de verdad. Y yo les diría a estos otros losers, como yo, que quizá el juego esté roto, sí. Pero lo más probable es que han jugado como el culo (o los demás mejor que ellos).

Está claro que a todos nos hace felices ganar, pero de ahí a mejorar nuestra valoración o crítica de un juego va un mundo.

A mí si un juego no me gusta, no me gusta. y da igual si pierdo o gano.

Y si el juego me gusta, estoy feliz si gano. Pero aún me pone más si pierdo, porque quiero otra oportunidad.

3 comentarios:

  1. A mi me pasa algo parecido. Eso si, si el juego es bueno o al menos he disfrutado jugandolo. El último caso fue el Noah. Mi novia y yo jugamos 6 partidas seguidas, y en las 6 palmé estrepitosamente. Y yo le decia, nena otra mas!!! Hasta que nos fuimos a dormir, ella invicta y yo sin probar las mieles de la victoria. xDDD

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  2. Jejejeje, suele pasar que hasta que uno no gana, no puede dejar de jugar... aunque a veces hasta que uno no pierde, no empieza a verle defectos al juego :P

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  3. Hay de tó en la vida. No es nada nuevo. Y como siempre, uno cnd lleva ya tiempo en la afición distingue comentarios que vaya telita.
    A mí el ganar o perder no me afecta para que el juego me guste/maraville/espante. Recuerdo que cuando jugué por 1ª vez al Tigris jugué a 3, yo de novato en una partida con 2 mendas que ya sabían jugarlo. Menuda me dieron! aquello era un duelo entre los dos y yo haciendo ruido de fondo xDD, y aun así salí aquella tarde diciendo "qué juegazo he probao por dios!".
    Y hace poco probé otro que ya en mitad de partida me decía "éste me lo pillo sí o sí", y no recuerdo siquiera cómo quedé en la partía. Sé que no gané. Tpco fui último. Lo que importan son las sensaciones. Pero vamos, en este hobby y en tantísimos otros!

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