Anoche, para intentar distraer la mente de pensamientos tristes, decidí llamar a Pepe y a mi hermano Alber para jugar unas partidas a algo.
Preparé el set up del Road to Canterbury y le enseñé a Pepe las normas en un santiamén. Decidimos empezar una partida hasta que viniera Alber y así aprender las mecánicas. Paramos a medias para reengancharle.
Con las mecánicas asimiladas, nueva explicación de normas (se explica y entiende en 10 minutos) y partida a tres jugadores que disfrutamos muchísimo. Un juego simple, bonito (vaya componentes)y divertido que volverá a ver mesa y del que caerá reseña casi seguro. Cada vez me gustan más los juegos sencillos con reglamentos fáciles y que se explican rápido y bien.
Buen juego. Ganó mi hermano.
Después de tentar, perdonar y matar algunos peregrinos, decidí seguir con otra nueva adquisición: Pastiche. Otro juego de Gryphon games (como el Canterbury) con componentes nuevamente espectaculares.
Pastiche es un juego familiar, muy familiar, sencillo y abstracto en el que tenemos que ir consiguiendo sets de cartas mediante la colocación de losetas.
A Pepe no le gustó demasiado (no se enteró de mucho, la verdad), a los demás sí. No es para quemar neuronas, pero un buen familiar.
Ganó otra vez mi hermanito.
Después de esto, decidimos pasar a algo más potente y le dejamos a Pepe estrenar el regalo que le habían dejado los Reyes Magos en casa de Mr. Meeple: el Caylus Premium.
¿Qué chulo es el jodío! Aunque los colores de los cubos son poco acertados y hacen que confundas los materiales (marrón, lila y dorado).
Pepe nos dio una buena paliza Aunque le aguanté hasta el final, los dos últimos turnos fueron demoledores: 104 puntos de Pepe por 86 míos. Palizaka.
Y ya para acabar, echamos un tiento a RED, un juego abstracto de Nestorgames que se juega en 15 minutillos. Me gustó el juego a pesar de que no me van casi nada los abstractos. Volvió a ganar Pepe, así que no gané una partida en toda la noche.
No anda la cabeza muy fina, pero gracias Pepe y a Alber, al menos vamos intentando mejorar.
Gracias a los dos por el apoyo y la compañía.
Un placer amigo!
ResponderEliminarCómo me gusta la estética del Caylus premium!! algún día caerá, pero con el precio q tiene me da pereza, y más en estos tiempos...
ResponderEliminarÁnimo. Siempre es bueno distraerse, y más con buenos juegos en buena compañía.
ResponderEliminarPrecisamente el Canterbury llegará a nuestras ludotecas (a la de Randast concretamente), en breve.
ResponderEliminarYa te comentaré cuando hagas la reseña de lo que opinamos los norteños :)
Pues a mi me gusta más la edición anterior. Esta me parece muy oscura y cuando juegas de noche da sensación de agobio y pesadez. A ver si cae pronto esa reseñita de Road to Canterbury, que me llama mucho. Animo amigo!!!
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