Juegos pequeños, grandes juegos: Botswana

En Juegos pequeños, grandes juegos hablaremos de juegos que pueden entrar en tu ludoteca sin que tengas que preocuparte por el poco espacio que te queda en las estanterías, porque abultan muy poco, pero son muy recomendables. 

Autor: Reiner Knizia
Publicado por: Gryphon Games, Amigo y otros
Año de publicación: 1994
Duración: 25 minutos
Número de jugadores: 2-5

Botswana es un pequeño juego de Reiner Knizia que se editó por primera vez en 1994 con el nombre de Flinke Pinkle (Amigo).

Desde esa primera edición, el juego ha sido publicado con diversos nombres: Quandary (versión sobreproducidísima y molona de Milton Bradley), Loco! (de Fantasy Flight Games), Botswana (Eagle y Gryphon) y Wildlife Safari (útlima edición de Gryphon). 

Estamos ante uno de esos sencillos y matemáticos juegos de Reiner Knizia que destacan por su sencillez y por lo bien que fluyen.

Componentes

La versión de Gryphon, como siempre, es espectacular: treinta cartas de calidad y, en lugar de fichas, 25 animales de plástico que harán las delicias de los más pequeños. Sobreproducido, sí, pero muy chulo.

El juego

Muy sencillo. El mazo de cartas está compuesto por treinta cartas, numeradas del cero al cinco, seis por cada uno de los cinco animales.

Al inicio de ronda se reparten todas las cartas entre los jugadores (según el número de jugadores  se retiran varias cartas al azar).

En su turno el jugador activo juega una carta de su mano y la coloca boca arriba en la mesa, en la pila del animal correspondiente. Acto seguido coge uno de los animales, que no tiene que coincidir con el animal jugado.

Como anécdota, decir que el traductor de Flinke Pinkle modificó una norma al traducir el reglamento: en el original de Knizia se decía que al jugar una carta se podía coger una ficha de cualquier color (no había animales sino fichas de colores) y la traducción mencionaba que se podía coger una ficha de cualquier color excepto del que se había jugado.  

La errata le gustó a Knizia, quien parece ser que comentó que le parecía mejor juego así. La errata nos permite jugar con dos variantes: juegas carta y coges cualquier animal o juegas carta y coges cualquier animal excepto el jugado.

La carta recién jugada se coloca sobre las cartas del mismo "palo" de modo que se vean todos los números jugados hasta el momento y la última carta jugada esté encima de las demás.

Cuando alguien  juega la sexta carta de uno de los animales la ronda acaba y se puntúa.

Cada elefante vale cero puntos. 5 cada león.
Esta reserva vale 13 puntos

Cada animal que hayamos cogido durante la ronda valdrá tantos puntos como la última carta jugada de ese animal. Es decir, si la última carta de león jugada es un cinco, tendremos cinco puntos por cada león que hayamos cogido.

Sumamos todos los puntos y jugamos tantas rondas como jugadores.

Al final del juego gana quien tenga más puntos.




Opinión

Pequeño gran filler matemático de esos que tan bien sabe (o sabía) hacer Knizia.

Fácil de explicar, fácil de aprender y muy divertido, los animales de plástico hacen que sea muy atractivo y se convierta en una apuesta segura para jugarlo en familia.

Si os gustan los fillers Botswana (Loco! o como quiera que lo encontréis editado) es garantía de éxito. la única pega que tiene es el precio de Gryphon (ay amigos, la sobreproducción se paga).

Hasta la próxima reseña.