sábado, 10 de abril de 2021

Partidas marzo 2021

 


Complicado mes de marzo con pocos estrenos, mucho trabajo y desbordante estrés. Pésimo combo.

75 partidas y únicamente 3 descubrimientos. Pocos pero buenos.


My City

Sencillísimo juego de poliminós cuya chispa está en que nos presenta una campaña de 24 partidas en modo legacy.

Cada capítulo de la campaña se desarrolla en tres partidas en las que irán apareciendo nuevos componentes, nuevas normas y restricciones.

Al incio de cada capítulo abrimos un sobre sellado y descubrimos qué nos va a ofrecer la nueva trilogía de partidas.

Los ganadores van añadiendo puntos según su puntuación en cada partida y al final de cada una de ellas recibirán bonus según su posición. Los que queden primeros reciben más puntos, pero por contra reciben también menos bonus o algunos "malus".

El juego es sencillísimo: cada jugador tiene el mismo juego de poliminós. En el centro de la mesa hay un mazo de cartas en el que cada carta muestra uno de esos poliminós. En cada turno se revela una de las cartas del mazo y cada jugador coloca esa loseta en el tablero respetando las normas de colocación.

Cuando ya no se pueden colocar más losetas de poliminós porque se acaba el mazo, porque los jugadores no pueden colocar o porque todos han pasado, se cuentan los puntos y finaliza la partida.

Como decía el juego es tremendamente sencillo y el incremento de normas y componentes no complica excesivamente el desarrollo de las partidas. Es un juego para disfrutar en familia y gozar la campaña con las sorpresas, así como las nuevas trabas y los nuevos retos que van apareciendo.

Como pegas diría que al final de la campaña te queda la opción de jugar al juego base, el cual resulta  demasiado plano e insulso.

Además, otra cosa que no me ha entusiasmado es la forma de equilibrar la partida mediante los bonus o malus que se entregan a los jugadores al final de cada partida. Ganar determinadas partidas te puede penalizar bastante en el futuro sin poder evitarlo, porque no sabes muy bien qué va a venir.

Aún así, y a pesar de estos dos pequeños defectos, en casa hemos disfrutado enormemente la campaña y la recomiendo encarecidamente, en especial para quienes tengáis niños en casa o familiares no muy jugones.

Estupendo juego familiar ligero.



Honey Buzz

Colocación de losetas y trabajadores en un juego con un componente puzzle muy importante, pero con su importante dosis de estrategia.

Detrás de ese aspecto afable, casi infantil, se esconde un juego un poco seco, sesudo y bastante cabrón  en el que te quedas sin las losetas de néctar que necesitas en cuanto te despistas un par de turnos. 

En ese sentido de relación estética-sequedad-sesudez, Honey Buzz es como Calico, otro juego que aparenta ser cuqui y luego es otra cosa. No obstante, Honey Buzz es como Calico, "pero bien": mejor cerrado, más compacto, con más variables y con bastante más interacción.

Calico se fue de casa por ser excesivamente solitario y seco. Honey Buzz en cambio tiene un punto de interacción con los bloqueos en la colocación de trabajadores (bloqueos por cantidad de abejas) y por la carrera en obtener las losetas de néctar, los objetivos de puntos y los encargos de miel.

Un juego precioso con componentes fantásticos, su parte solitaria, su parte interactiva y muchísima más chicha de lo que aparenta. 

Estoy encantadísimo con su compra y ha sustituido a Calico que ya está en otro hogar en el que le darán el amor que se merece (o no).



Dune Imperium

Al acabar la primera partida de Dune Imperium te queda la sensación de que estás ante un Clank! con pelea. Y claro, cuando le echas un vistazo a los autores del juego te das cuenta que son los mismos creadores de Clank!

Misma mecánica de mercado y misma mecánica en el multiuso de cartas con algún matiz interesantísimo en la gestión de estas últimas. En tu turno robas 5 cartas, juegas una por meeple que tengas y el resto es lo que te queda para comprar en el mercado y obtener recursos. La gracia está en que las cartas te indican qué planetas (es decir qué casillas) puedes activar. Dicho de otro modo: sólo puedes enviar tu meeple a los planetas-casillas que indica la carta jugada. Eso limita mucho y hace que en Dune Imperium sea más importante que en Clank! la adquisición de cartas del mercado. 

Otra importante diferencia con Clank! está en la batalla de final de ronda. Al final de cada una los jugadores luchan en la batalla que se ha ido cociendo en los turnos previos mediante el envío de tropas. El ganador de la batalla recibirá un suculento bonus y el resto de participantes algún aliciente según su clasificación en el conflicto. Cada batalla ofrece momentos tensos y divertidos, con giros inesperados y raciones de buena jodienda bien divertida.

El final de partida se dispara cuando un jugador alcanza los diez puntos de victoria. Entonces se acaba la ronda y quien tenga más puntos gana. Como podéis ver, los puntos son escasos y difíciles de conseguir. Sólo puedes puntuar subiendo en el track de cada planeta (cada vez que visitas un planeta exterior avanzas en su correspondiente marcador y obtienes un punto de victoria si llegas a una determinada altura de dicha pista), obteniendo la exclusiva  insignia de un planeta (llegando a los tres últimos pasos de cada pista de planeta), con el bonus de vencedor de algunas batallas, con el uso de algunas (pocas) cartas, con algunas cartas de intriga que dan puntos durante o al final de la partida y finalmente comprando cartas que te dan un punto pero te ensucian el mazo (lo que serían los tomos de Clank!).

Y poco más, Dune Imperium es un "Clank! adulto" que cambia la carrera por el conflicto directo y la pelea. Un Clank! 2.0 en el que hay más tensión y puntuaciones ajustadísimas. En mis tres partidas la última ronda siempre ha sido durísima y casi todos los jugadores han llegado con posibilidades de victoria, que se ha decidido por giros inesperados, golpes de suerte o sorpresas sobre la bocina.

Quienes leáis este blog sabéis de mi amor por Clank! y a pesar de sus similitudes con éste, Dune Imperium tiene suficientes aspectos diferenciales que le permiten coexistir con aquel en una ludoteca. Aunque es feo como el demonio, compra segura. Qué digo, segurísima. Caviar.

Mientras escribo esta mini reseña rememoro la última partida jugada y lloro al recordar a la rata de Funattic Channel ganándome inesperadamente en el último turno al robar la carta necesaria en el momento apropiado.  Me vengaré, joder, sois testigos!

Ganas de echar la cuarta ya!!!!!!!!!!

Y hasta aquí las novedades de marzo. Como decía al principio pocas pero buenas.

Jugad mucho.

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...